18 de febrero del 2021
¿Es el liderazgo la base de la educación?
Hace no muchos años la educación se fundamentaba, básicamente, en la transmisión de conocimientos del profesor hacia los alumnos: les transmitían unas ideas, unos métodos, unos conocimientos para luego repetirlos. Sin embargo, la educación ha virado, y hoy el alumno ha pasado de ser receptor pasivo a centro activo del aprendizaje: él mismo dirige su conocimiento y la forma de adquirirlo, y el profesor le acompaña en este camino.
Pero este cambio no es completo si no hay también un cambio en el alumno, que debe convertirse en líder. Un líder que tenga el norte claro, que sea capaz de leer las coordenadas de la meta final y sepa ir sin dudar. Es por ello que, hoy día, el liderazgo es básico para la educación, así como también la importancia de saber trabajar en equipo.
Los líderes se basan en su capacidad de escuchar y de comunicarse, en disculparse y pedir perdón, en reinventar mediante iniciativa y creatividad, en la disposición a participar activamente, en saber tomar decisiones adecuadas en situaciones complicadas, a ser inteligente emocionalmente y, sobre todo, a pensar en los demás antes que en uno mismo.
Es cierto que el mundo escolar requiere liderazgo por parte de las instituciones educativas, así como del profesorado, pero sin duda se necesita igualmente liderazgo por parte del alumnado (diferentes tipologías de liderazgos en los alumnos).
Cuando el alumno se siente líder, siente que lo que hace tiene valor, que se le reconoce, dará lo mejor de sí, y ejercerá una influencia hacia los de su alrededor, dándoles herramientas y ejemplo para convertirse también en líderes. Y se creará un entorno de confianza en el que el proceso de enseñanza-aprendizaje será totalmente significativo. Con el alumno siendo líder del aprendizaje, el profesor se convierte en el orientador de este aprendizaje, ayudándole a administrar correctamente todas sus virtudes, y poniendo el centro en los demás.
El líder es el que ayuda al compañero a aprender, es quien organiza actividades grupales para fomentar la cohesión, es quien tiene interés hacia el alumno nuevo o de aquel que no se siente del todo cómodo en el grupo, es quien escucha a todo el mundo para que todo el mundo se sienta querido y valorado. En definitiva, el líder inspira el trabajo bien hecho, motiva a quien está más desmotivado y desanimado, poniendo la mirada también en la educación emocional, tal como D. Alfonso Aguiló explica.
Teniendo en cuenta que el líder de hoy es quien cambiará la sociedad del mañana, en Viaró Global School fomentamos el liderazgo en cualquier situación y ámbito: queremos que el alumno sea un líder que sirva, que piense siempre en los demás, compartiendo sus virtudes con los demás y convirtiéndose en líderes todos aquellos que le rodean. Porque es así como la educación hará el cambio que tanto se está trabajando: gracias a los alumnos, siendo líderes que se den a los demás.