Pensamiento creativo

Hoy hablaremos de fomentar en nuestros hijos algo que van a necesitar en muchas facetas de su vida: pensamiento creativo.

Según wikipedia, el pensamiento creativo consiste en el desarrollo de nuevas ideas y conceptos. Se trata de la habilidad de formar nuevas combinaciones de ideas para llenar una necesidad. Por lo tanto, el resultado o producto del pensamiento creativo tiende a ser original. … Producir una forma de pensar nueva.

Es una capacidad con la que nacemos todos. Todos los niños son genios creativos. Pero por diferentes circunstancias la vamos perdiendo y justo para cuando llega la edad en la que todos necesitaríamos encontrar soluciones más innovadoras, hemos perdido esta capacidad en muchos de los casos.

Nuria Pérez nos da algunas claves para fomentar el pensamiento creativo en nuestros hijos (podéis leer más en este post).

“Fomentar el pensamiento creativo en los niños significa y se traduce en crear niños más autónomos, más resilientes y mejores líderes”.

Si dejamos a los niños explorar opciones y soluciones diferentes a sus pequeños problemas, fomentamos su autonomía y fomentando su autonomía creamos niños mucho más empáticos y capaces. Porque un niño que acepta que las cosas se pueden afrontar y se pueden enfocar de diferentes maneras, es un niño que está dispuesto a escuchar y a aceptar el mundo del otro y a abrazar las ideas del otro.

Es por esto que nos repiten mucho en el cole que tenemos que dejarles hacer más cosas por sí mismos, dejarles ayudar, que descubran de lo que son capaces, aunque a veces eso suponga que nos lleve más tiempo, se manchen o manchen la casa por ejemplo.

Tenemos que confiar en ellos para que puedan confiar en sí mismos. No hay nada más positivo que un niño seguro de sí mismo.

También nos recomienda Nuria que hemos de evitar llenar su agenda, su habitación, su tiempo... No se trata de llenarles de cosas sino de sacar lo mejor que tienen dentro.

Ellos necesitan tiempo para explorar, para investigar, para descubrir lo que saben hacer y lo que les gusta. Necesitan tiempo también para aburrirse, y si tienen sus días llenos de actividades y planes, no podrán desarrollar de igual manera todo su potencial.

Así que ya sabéis, la creatividad no es algo que tengamos que enseñarles, porque ya nacen con ella. Seguramente son más creativos que nosotros. Sólo hemos de confiar en ellos y proporcionarles las herramientas para expresar lo que llevan dentro.